Miedo al contagio de covid-19

El otro día, cuando «volví» a las redes, os pregunté de qué queríais que hablara en el blog y una de las respuestas fue el covid-19. A pesar de llevar ya dos años (¿más? He perdido la cuenta…) con esta enfermedad, los miedos siguen estando ahí.

Al igual que vosotros, yo tuve y tengo miedo a la covid. Aún hay muchas cosas que no sabemos sobre este virus y, a pesar de los mensajes tranquilizadores por parte de las distintas sociedades médicas, el miedo está ahí cuando tienes una enfermedad autoinmune como el lupus e hijos que también pueden contagiarse.

Transmití vuestra preocupación a la Asociación AMELyA Lupus Madrid, en la que colaboro de voluntaria, y decidimos publicar un artículo con las recomendaciones EULAR en vacunación covid-19 en pacientes con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas. Os lo dejo al final del artículo.

¿Me he vacunado?

Sí. Tengo 3 dosis de la vacuna y en mi próxima visita al médico, preguntaré si necesito una cuarta.

Tan pronto como salieron las vacunas, llamé a consulta y pregunté. Me dijo que sí y me faltó tiempo para pedir cita y vacunarme. Y lo hice sin miedo porque mi médico me dijo que corría más riesgo no vacunándome y que el balance riesgo/beneficio pedía a gritos que me vacunara.

¿Cómo viví yo la pandemia?

Como todos vosotros: con incertidumbre y miedo.

Procuraba estar al día con la información, acudiendo a fuentes fiables y de calidad, como siempre os he aconsejado. No me acerqué a blogs ni a foros. Básicamente, seguí los consejos que llevo años dándoos a vosotros (y siguiendo yo misma a la hora de informarme en cada artículo que escribo).

Al principio nos aislé a todos como si el mundo entero tuviera la peste. Los niños no jugaban con otros niños, procuraba que no tocaran nada y, si lo hacían, los embadurnada en solución alcohólica como si me pagaran por ello. También en Dubái tuvimos nuestra época de confinamiento, que afectó a mi hijo (de entonces 2 años) bastante. Le costó mucho volver a ser el niño sociable y abierto que era antes de la pandemia.

Cuando volvieron a abrir las guarderías, esperé 2 semanas antes de mandar a los niños para ver si había algún contagio o no. Lo mismo hice tras las pasadas navidades porque sabía que la mayoría habría viajado y podrían volver con covid sin saberlo.

Ah! Y, dato curioso y gracioso a más no poder (y tiro de sarcasmo, que es lo mío), Jorge dio positivo en covid en Navidad. Ja. Toma ya. Pero ¿sabéis qué es lo más curioso? Que yo no me contagié!! Y eso que estuve durmiendo con sus toses 2 ó 3 días… Jamás lo entenderé.

Decían que la hidroxicloroquina tenía ciertas propiedades protectoras frente a la covid-19, pero al final resultó que no… ¿Fue, entonces, por efecto de la vitamina D? La vacunación seguro que tuvo un papel primordial en que yo no me contagiara, pero el caso es que, gracias a Dios, salí ilesa. Uff, esos 10 días sí que me volví una auténtica talibán de la desinfección, je.

Y ahora, ¿qué? ¿Debo seguir aislándome y protegiéndome?

Me gustaría, sí, pero es complicado. Creo que la covid ha venido para quedarse y que, poco a poco, tenemos que vencer el miedo y aprender a convivir con este maldito virus como convivimos con el de la gripe.

No podemos seguir aislándonos más de lo que nuestra enfermedad, sea la que sea, nos obliga a aislarnos por el dolor o el cansancio extremo; no podemos seguir evitando que los niños sean niños…

Estuvo bien «parar la vida» por un tiempo, mientras aprendíamos sobre el Sars-cov-2 y trabajábamos por matarlo para siempre. Pero eso no ha pasado ni parece que vaya a pasar… Así que es hora de volver a vivir el mundo tal y como lo conocíamos.

Mis niños juegan con otros niños. Si quieren dedicarse a chupar los columpios, pues que lo hagan. He decidido que no voy a poner más barreras a su normal desarrollo. Tienen que ser niños.

En cuanto a mí… Bueno, España, al menos, va a olvidar las mascarillas este 20 de abril (aunque no estoy de acuerdo con la decisión) … Quizá pueda protegerme yo, si sigo llevando mascarilla, pero ¿hasta qué punto es viable? Yo llego mascarilla, sí, pero el resto de las personas que van a convivir conmigo y mis hijos no las van a llevar. Y mucho me temo que no puedo obligarles a hacerlo.

Mi vida sería un sinvivir si me obsesiono con esto. ¿Me da miedo? Claro. Pero mi opinión es que no me queda otra: tengo que romper las barreras y aprender a convivir con la covid.

Recomendaciones EULAR sobre covid y vacunación covid-19 en pacientes con enfermedades musculoesqueléticas

Es el documento que hemos publicado desde AMELyA Lupus Madrid. Leedlo porque tranquiliza un poco en cuando a la infección por covid en lupus y otras autoinmunes. Espero que os ayude.

Ánimo a todos. Se avecinan tiempos de incertidumbre en los que vamos a tener que adaptarnos y reinventarnos una vez más.

Recomendaciones EULAR en la vacunación de pacientes con enfermedades musculoesqueléticas contra el virus SARS-CoV-2 (covid-19)

Sabemos que, aunque llevamos conviviendo con la Covid-19 dos años ya, muchos de vosotros aún tenéis preocupaciones. Además, nos acercamos al levantamiento de las medidas anti covid y eso traerá miedos y preguntas que esperamos poder responder con la inestimable ayuda del Dr. Gil Aguado que, como siempre, ha revisado el artículo para garantizar que, desde la asociación, recibís información de máxima calidad.

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